Francia y Turquía empataron 1-1 su partido clasificatorio para la Eurocopa 2020, un encuentro que se vio marcado por la celebración del equipo otomano tras el gol de Kaan Ayhan.
Después del partido y con la emoción del momento, los jugadores turcos se acercaron al lugar donde estaba su afición, realizando el saludo militar, un gesto que ya repitieron en el partido contra Albania.
Este saludo nace como muestra de apoyo a los ataques de su país contra posiciones kurdas en la frontera con Siria, condenados por una buena parte de la comunidad internacional.
En Francia no ha sentado nada bien este gesto. El ministro de Exteriores, Jean-Yves Le Drian, anuló su asistencia al partido para no entrevistarse con responsables turcos ante la tensión diplomática que viven ambos países por los bombardeos de Ankara a posiciones kurdas en la frontera con Siria.
Francia es uno de los países que ha condenado de forma más vigorosa los ataques ordenados por el presidente turco contra posiciones kurdas y anuló la venta de armas a Ankara.