El día empezó torcido para el Real Madrid, con un Sergio Ramos estará al menos mes y medio de baja tras operarse el menisco de la rodilla izquierda. Sin embargo, todo ha sido iluminado gracias a Raphael Varane quien, por un momento, recordó al capitán de los blancos en Huesca.

Recordó a él porque fue el gran goleador de la tarde. Y lo fue además en una faceta en la que Sergio Ramos destaca, y no poco, a la hora de irse al ataque. Sin el camero, las jugadas a balón parado podrían verse en un problema, pero el francés, en Huesca, ha dicho 'aquí estoy yo'.

Y menos mal, porque se estaba poniendo todo muy mal con un cuadro oscense que se adelantó en el marcador con un golazo de Javi Galán. Sin embargo, y tras más de un año sin marcar, apareció Varane.

Primero, en una falta magistralmente lanzada por Benzema que golpeó en la madera. Tras el rechazo, Varane, atento, impuso su fuerza aérea para colocar la bola en las mallas del Huesca.

El segundo llegó igualmente de una acción a balón parado La puso Kroos, Casemiro golpeó una vez y el balón, repelido por el arquero oscense, fue justo a la zona donde Varane esperaba, o a la zona donde Varane vio que iba a ir la bola.

Así evitó un susto el Real Madrid, y las aguas bajan más calmadas tras la rueda de prensa previa de Zidane y la noticia de la operación a Sergio Ramos en su rodilla izquierda.