La Premier League está actuando con contundencia tras los errores arbitrales que se producen en su competición. Tras descender a Adrian Holmes, línea que anuló el gol de Luis Díaz ante el Tottenham por un fuera de juego que no existió, ahora le ha tocado el turno al árbitro principal Anthony Taylor, después de un fallo en el encuentro entre el Wolverhampton y el Newcastle.

El trencilla señaló un inexistente penalti a favor del Newcastle, por una supuesta patada de Hwang-Hee Chan a Fabian Schar. El VAR no intervino en la jugada.

La pena máxima sirvió para que el Newcastle se pusiera con 1-2 en un encuentro que acabó en empate.

"Fue una decisión terrible. Escandalosa. Y también que el VAR no hiciera nada", dijo Gary O'Neal, entrenador del Wolves.

Taylor, por tanto, pitará un partido en la Championship, donde llevaba cuatro años sin arbitrar. Será el encargado de dirigir el Preston North - Coventry City.

El árbitro, que vivirá un partido en Segunda, arbitró la final de la Europa League 2022-23 en la que se enfrentaron el Sevilla y la Roma.