El Real Madrid regresó al estadio Santiago Bernabéu ante su público y con una goleada frente al Celta de Vigo, que se llegó a adelantar hasta en dos ocasiones en el marcador.

Los de Ancelotti completaron un gran partido en ataque, pero dieron cuenta de las carencias que tiene el equipo en defensa.

Benzema marcó un hat-trick, Camavinga debutó con gol... pero el protagonista fue Vinicius. Al brasileño parece haberle cambiado la cara esta temporada y ya aúna su indiscutible velocidad y desborde con el control, la templanza y, sobre todo, la definición de cara a puerta.

En el 3-2, tras un gran pase en profundidad de Karim, el '20' batió a Dituro con un tiro pegado a la cepa del poste en el minuto 55.

El brasileño enloqueció y, en la celebración, saltó la valla de publicidad y se abrazó con la afición. Le agarraron, le besaron, le abrazaron, le gritaron en la cara... y todo en plena pandemia.

Sin distancia social, con aficionados sin mascarillas y con Sánchez Martínez esperándole para mostrarle la tarjeta amarilla, Vinicius tuvo que ser 'rescatado' por la Policía.

La imagen del festejo no tardó en hacerse viral y las reacciones y críticas han corrido como la pólvora dada la irresponsabilidad e imprudencia del extremo en la celebración.