En el tiempo de descuento todas las alarmas se encendieron en el Barcelona. Gerard Piqué se llevaba la mano a su tobillo derecho y mostraba evidentes gestos de dolor. Acababa de doblarse ese tobillo tras un salto con un jugador del Nápoles. Y se tuvo que retirar lesionado.

Clement Lenglet entró en su lugar apenas a un minuto del final del encuentro, a pesar de que el central catalán pidió calma al banquillo. Quería volver al campo, pero Quique Setién prefirió no arriesgar y le retiró el terreno de juego.

Una malísima noticia para el Barça, que el próximo domingo visita el Santiago Bernabéu (21 horas) en un duelo que se antoja clave para el devenir de la Liga. El cuadro culé es líder de la competición con dos puntos de ventaja sobre los de Zinedine Zidane.

¿Llegará Piqué al Clásico? Es la gran pregunta que se hacen todos los aficionados del Barcelona. Su papel como jefe de la zaga es fundamental para el sistema del equipo. En cinco días conoceremos si está listo para saltar al verde del Santiago Bernabéu.