El Atlético de Madrid no levanta cabeza. Tras la bochornosa eliminación copera ante la Cultural y Deportiva Leonesa, no pasó del empate a cero en la mañana de este domingo frente al Leganés. Y la afición explotó.
Una vez que Mateu Lahoz señaló el final del encuentro, los aficionados presentes en el Wanda Metropolitano regalaron una sonora pitada a los jugadores mientras éstos pedían disculpas en el centro del campo.
A lo largo del partido, cuando el Leganés rozaba el gol en muchos momentos, desde el Fondo Sur asomaron gritos de ánimo para el técnico, Diego Pablo Simeone, muy cuestionado en las últimas horas. Parte del estadio respondía a estos cánticos con silbidos.
Esta temporada está siendo la más complicada para el preparador argentino desde que se hiciera cargo del banquillo rojiblanco. La inesperada caída en Copa del Rey ante un equipo de Segunda B ha enfriado la relación entre Simeone y la grada. Tanto que los silbidos contra el técnico se están volviendo costumbre.