Menudo recibimiento tenían en la plaza de la Catedral de Sevilla esta pareja de recién casados. A la salida de su enlace estaban esperando varias decenas de aficionados del Athletic allí congregados a la espera de la final de la Copa del Rey ante el Mallorca.

En cuanto vieron salir a la pareja, un cántico sonaba con fuerza en la plaza: "¡Son del Athletic, los novios son del Athletic!"

Tal fue todo que los novios quisieron mandar un mensaje a los hinchas y al Athletic desde la celebración de la boda: "Fue una sorpresa ver esa plaza. ¡Aúpa Athletic!"

Lo cierto es que dieron suerte a los pupilos de Ernesto Valverde. En la final ante el Mallorca, el Athletic ganó en los penaltis la Copa del Rey, título que se les resistía desde hacía 40 años.