El Real Madrid estaba a punto de hacerse con la Supercopa de España. Tras la parada de Courtois, Sergio Ramos se disponía a materializar el cuarto lanzamiento, el que podría ser el decisivo.

Mientras, en el palco, el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, no podía contener los nervios. Caminaba de lado a lado, junto a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el máximo mandatario de la RFEF, Luis Rubiales.

Tras el gol, el presidente del club blanco se liberó. Alzó los brazos y celebró mientras Enrique Cerezo, presidente del Atlético de Madrid, observaba el terreno de juego con la mirada perdida. Otra final perdida ante el Madrid de Zinedine Zidane.