El Levante eliminó al Girona de la Copa del Rey al empatar a un gol en el partido de vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey con un cómputo global de 3-1, tras un partido en el que los catalanes estuvieron a un gol de igualar la eliminatoria.

Tras adelantarse el Girona en la primera mitad, el Levante se rehizo en la segunda parte gracias un brillante Morales que tiró del equipo de López Muñiz y certificó con un gol el pase a octavos de final.

El Celta sobrevive por la falta de pegada del Eibar

El celta se clasificó para los octavos de final de la Copa del Rey después de ganarle al Eibar (1-0) con un gol de penalti de Iago Aspas en el minuto noventa, en un mal partido del conjunto gallego que sobrevivió gracias a la falta de pegada del Eibar.

El Eibar ofreció más que el Celta durante el primer tiempo. Monopolizó la posesión de la pelota, sobre todo durante los veinte minutos iniciales, en los que acumuló un tiro flojo de Jordán o un remate forzado de Kike García cerca del área pequeña tras un centro de Bebé.

El Eibar careció de pegada, para desesperación de su entrenador, José Luis Mendilibar, que ahogó al Celta, bochornoso, encerrado en su campo, incapaz de crear una buena ocasión de peligro hasta el minuto noventa, cuando Iago Aspas, después de ser derribado en el área por Dimitrov, marcó de penalti el gol de la victoria