Los aficionados del Nápoles parecen haber olvidado la terrible tragedia que ha supuesto el coronavirus en Italia. Miles de ellos salieron a la calle después de que el equipo de fútbol ganara la Copa.

Y la OMS les ha recriminado este acto irresponsable. "Desgraciados. ¿Qué quieres que les diga?", ha afirmado el subdirector de la OMS, Ranieri Guerra.

"El problema es ese, porque en estos momentos no nos lo podemos permitir", ha explicado. En Italia las cifras de fallecidos por Covid-19 supera las 34.000. Unos números terribles.

En la Plaza Triestre, una de las más emblemáticas de la ciudad de Nápoles, se reunieron hasta 5.000 personas. Todos ellos sin mascarilla y sin mantener la distancia de seguridad.

El cuadro de Gennaro Gattuso se llevó la Copa tras vencer a la Juventus de Cristiano Ronaldo en los penaltis (4-2). El portugués, que se reservó el quinto lanzamiento, se quedó con cara de pocos amigos al ver que no iba a disponer de la oportunidad de lanzar.

Las críticas en la prensa deportiva italiana a su partido fueron feroces. Se trata de la segunda final que Cristiano pierde desde que viste los colores de la Juventus. La primera fue la Supercopa de Italia.