Karim Benzema fue duda hasta el último momento en el derbi entre el Real Madrid y el Atlético. Tras retirarse lesionado contra la Real Sociedad, el francés superó sus molestias para estar a disposición de Carlo Ancelotti en el trascendental partido contra el cuadro de Simeone y, como siempre, cumplió con creces.

Porque al francés no le hace falta un Balón de Oro para ser o el mejor o de los mejores futbolistas que hay en el planeta. Pura clase, algo que era de sobra conocido, y ya 'mata'. Ya no es 'gato', ya es un tigre.

En el minuto 16 hizo su magia en una jugada perfecta del Real Madrid tras pérdida del Atlético. Salieron raudos, y Asensio encontró a Vinicius en la banda derecha. El brasileño oteó el panorama y se la puso a Karim Benzema. Lo que hizo el francés puso en pie a todos en el Bernabéu.

Porque el galo remató de volea con gran precisión y potencia para poner así el broche a una espectacular jugada de los madridistas para batir a Jan Oblak. Así, con un disparo desde más allá del punto de penalti, el Real Madrid se puso por delante en el derbi.

Todo en pocos toques. Todo tras una pérdida de balón de Koke en un pase que costó muy caro al Atleti. El remate de Benzema era, simplemente, imparable.

Fue el primer disparo a puerta del partido y prácticamente el único del Real Madrid en un primer acto que se fue con 1-0 al descanso gracias al golazo de Benzema.

No volvió a salir tras el paso por vestuarios. Benzema aguantó lo que pudo e hizo lo que debe como delantero del Real Madrid que es.