La Juventus de Turín se impuso por 2-1 al Milan en un partido decidido por los goles del argentino Paulo Dybala y del bosnio Miralem Pjanic, y se clasificó para la semifinal de la Copa Italia, en la que se enfrentará al Nápoles.

El campeón de Italia logró eliminar a un Milan que luchó hasta el final en busca de la igualada y en el que debutó el español Gerard Deulofeu, último fichaje de esta sesión de mercado. El técnico de los turineses, Massimiliano Allegri, confirmó la alineación ofensiva que ganó el domingo a la Lazio y apostó por el croata Mario Mandzukic, el colombiano Juan Guillermo Cuadrado, Dybala e Higuaín, todos en el campo desde el primer minuto.

Los "bianconeri" se hicieron con el mando del juego desde el comienzo y lograron una doble ventaja antes del descanso, gracias a Dybala y a Pjanic. El argentino puso el 1-0 en el marcador con un violento derechazo desde dentro del área de penalti mientras que el centrocampista bosnio batió al portero Gianluigi Donnarumma con una falta directa desde los 18 metros. El Milan sufrió mucho la intensa presión de sus rivales y nunca logró rematar a portería en los primeros 45 minutos.

En la reanudación, el conjunto 'rossonero' logró reabrir el duelo gracias a un gran gol de media chilena de Bacca pero Stefano Locatelli le complicó inmediatamente las cosas, al ver la segunda tarjeta amarilla por una dura e inútil falta sobre Dybala. A pesar de la inferioridad numérica, el Milan demostró carácter y siguió apretando en busca de la igualada.

En los últimos minutos, Montella dio paso al excanterano del Barcelona Gerard Deulofeu para subir el peso ofensivo de su equipo. El extremo español tuvo la mejor ocasión para el conjunto milanés pero llegó a rematar casi desde la línea de fondo, lo que permitió al portero parar su remate con seguridad. En las semifinales, el Juventus se medirá con el Nápoles, que eliminó a la Fiorentina.