El presidente de la Liga, Javier Tebas, ha participado en el foro virtual 'Adea Conecta' y ha desgranado cómo será el regreso del fútbol en España.

Tebas ha explicado las cinco fases que se realizarán de aquí a que termine la temporada, siempre que el coronavirus permita la vuelta de los futbolistas a los campos. Asimismo, ha afirmado que habrá descensos pase lo que pase porque la Liga "tiene que ser de 20 equipos".

"No habrá ampliación de categorías. Todos los contratos se hacen a un modelo de competición de 20 clubes y no puede ser. Habría que modificar tanto que perjudicaría a todo el mundo. Habrá descensos también", ha señalado.

Por otra parte, ha anunciado que los equipos que se nieguen a jugar recibirán sanciones: "Si algún club se negara a jugar, estando ya la autorización de sanidad, sería sancionado perdiendo sus partidos como ha pasado antes".

Primera fase: "Estamos intentando que esta pandemia no sea también una pandemia económica. Queremos volver cuanto antes a la normalidad porque muchas familias dependen del fútbol. Ya estamos planificando qué pasará económicamente la temporada que viene. La primera fase nada más estalló el estado de alarma es la elaboración del calendario de cuándo podremos volver a entrenar y jugar. Hemos tenido que planificar con la UEFA y el resto de Ligas europeas. Nuestro calendario está muy ligado con las competiciones europeas. Se establecieron varias alternativas de cuándo podíamos empezar. Hemos trabajado bloques, Ligas y después competiciones europeas. Parece que ahora va todo más en estos bloques. Depende de la evolución de la pandemia en diferentes países y en el levantamiento de restricciones. En Alemania ya llevan unos días entrenando y tiene previsto reanudar en mayo. La opción de bloques puede que sea la más probable. Nos reunimos dos veces los presidentes de la Liga para ver protocolos y cómo están actuando los diferentes gobiernos para tener más información".

Segunda fase: "Una vez que hemos resuelto esta fase del calendario se inició la segunda que es la evaluación de los daños que tendríamos si no jugábamos o si lo tenemos que hacer a puerta cerrada. Valoramos esos daños en mil millones de euros si no volvíamos a competir. Y si jugásemos a puerta cerrada supone unos 300 millones de euros en daños. A partir de aquí, establecimos estrategias laborales. Algunos clubes hicieron ERTES y otros han acordado con jugadores rebajas de sueldo. Y después otro tipo de reducciones de salarios en función de si vuelven y si es a puerta cerrada o no. De los 42 clubes, 38 tiene este tipo de acuerdo. Esta crisis afecta mucho más a los grandes clubes porque no son tan dependientes de los derechos audiovisuales. Eso le supone un 30%".

Tercera fase: "La tercera fase fue el desarrollo de un protocolo de cuándo y cómo volvemos a entrenar. Es un tema especial porque es un deporte de contacto y necesitamos tener una seguridad sanitaria. Todos los clubes debemos hacerlo en común. Si uno no cumple el protocolo sanitario y comete un error y se infectan jugadores, afecta a todos los demás. Es importante que sea un protocolo regulado y aprobado por las medidas sanitarias. Siempre tenemos que tener la autorización sanitaria para volver. Se ha hablado con los clubes y explicado todo. Es clave la ejecución de este protocolo. También hemos trabajado las pérdidas de flujos de caja que generan hasta final de temporada, si van a tener problemas de tesorería. Los clubes están financiados por entidades financieras, fondos, etc. Intentamos resolver esta situación".

Cuarta fase: "La cuarta fase es el protocolo de cómo vamos a jugar a puerta cerrada. Ahora es cuando más tiempo le estamos dedicando. No es igual al de los entrenamientos porque aquí tenemos cuándo viajan los equipos, dónde se alojan, cuánta gente entra en los estadios, etc. Hemos nombrado inspectores a los directores de los partidos para que se cumpla todo y cada club ha destinado un coordinador de crisis. En esta fase, una de las reuniones han sido con abogados de los clubes para ver cómo se resuelven los contratos de los jugadores que acaban el 30 de junio. La gran mayoría de los contratos se establece que son por temporada. Entonces si se alarga los contratos quedarían alargados de forma automática, pero es un elemento de discusión. Habrá que sentarse con los medios audiovisuales para negociar los perjuicios, pero lo haremos cuando esté todo más claro de cuándo volvemos a jugar. Hablamos de 500 millones de pérdidas si no jugamos. A puerta cerrada intentaríamos perder lo menos posible, pero ya hay un daño audiovisual porque nosotros vendemos a parte los derechos a bares y ahí ya no se podrá ver. Se pierden unos 39 millones".

Quinta fase: "En la quinta fase es prevenir lo que pasará la temporada que viene. Es muy probable que juguemos a puerta cerrada hasta diciembre y cuando vuelva el público no podrá haber aglomeraciones. Todo esto afectará a los límites salariales de jugadores y al mercado de ventas. Va a ser muy pequeño esta vez y generará menos ingresos a los clubes".