Lo que hace semanas parecía un simple rumor está a punto de convertirse en realidad. El Inter Miami se está reforzando a base de intentar reconstruir la plantilla del Barcelona que conquistó el triplete en 2015. El primero en llegar fue Leo Messi, la mayor estrella que jamás haya pisado la MLS y a raíz de eso el proyecto solo ha ido a más.

Días después de oficializar a Messi, el Inter Miami cerró la contratación de Sergio Busquets. Ambos ya debutaron el pasado sábado ante Cruz Azul, en un partido en el que el argentino dio la victoria a su equipo con un golazo de falta en el último minuto de partido.

El siguiente en llegar fue Jordi Alba. Después de rescindir su contrato con el Barcelona al terminar la temporada, el lateral catalán se incorporaba como tercer refuerzo del Inter. Parece que no basta con la llegada de estas tres estrellas para intentar rescatar a un equipo hundido en lo más profundo de la tabla de la MLS. El club estadounidense quiere más.

Durante los últimos días se ha especulado con la llegada de Luis Suárez. El uruguayo, con contrato en Gremio hasta 2024, es una opción que ha cobrado mucha fuerza estas última horas. Y más sabiendo que el Inter Miami ha hecho oficial la adquisición de una nueva plaza de extranjero, ya que las tenía cubiertas todas.

Cabe recordar que en un equipo de la MLS se permite un máximo de ocho jugadores que no sean ni canadienses ni estadounidenses. "Inter Miami CF anunció hoy que adquirió un puesto en la lista internacional de los San Jose Earthquakes a cambio de $150,000 en 2023 General Allocation Money (GAM)", anunció el club en un comunicado.

Esta operación facilitaría la posible llegada de Suárez y lo reuniría de nuevo con Messi, el mejor socio que ha tenido el charrúa a lo largo de su carrera tanto dentro como fuera del campo.