La Fiscalía que investiga el caso de la muerte de Diego Armando Maradona ha imputado a siete personas por presunto homicidio simple con dolo eventual. Los siete imputados son trabajadores de la salud que atendieron al exfutbolista argentino en los momentos previos a su fallecimiento.

Las siete personas prestarán declaración indagatoria a partir del día 31 de mayo, según EFE. Los fiscales investigaban a estos siete sanitarios bajo la hipótesis de un presunto homicidio culposo. Pero tras evaluar un informe de la junta médica en el que once peritos estudiaron las circunstancias de la muerte de 'el Pelusa', la Fiscalía ha decidido imputar a los siete por presunto homicidio simple con dolo eventual. Este delito conlleva penas de 8 a 25 años de prisión.

En dicho informe se recoge que el trabajo del equipo médico de Maradona fue "inadecuado, deficiente y temerario" y abandonó "a la suerte el estado de salud del paciente".

Los imputados son los enfermeros Ricardo Omar Almirón y Dahiana Gisela Madrid; el coordinador de los enfermeros, Mariano Perroni; la médica que coordinaba la internación domiciliaria del exfutbolista, Nancy Forlini; el psicólogo Carlos Ángel Díaz; la psiquiatra Agustina Cosachov; y el neurocirujano Leopoldo Luque, el médico de cabecera de Maradona.