Se está convirtiendo en una práctica común: esperar a que deportistas de élite estén jugando partidos para aprovechar a entrar en sus domicilios y robarles objetos de gran valor. Eso ha sido lo que se encontró Reece James, jugador del Chelsea, al llegar a casa después de jugar el encuentro de Champions League del pasado martes.
El lateral derecho inglés se encontraba el pasado martes en Stamford Bridge disputando la primera jornada de la fase de grupos del campeonato europeo de clubes frente al Zenitde San Petersburgo, cuando cuatro hombres entraron en su mansión de Londres.
El propio James ha mostrado las imágenes de las cámaras de seguridad privadas del hogar en las que se ven a los asaltantes encapuchados abren la verja de la entrada y posteriormente usar un mazo para derribar la puerta principal.
Eso sucedía a las 20:28 de la tarde, y tres minutos después, volvían a aparecer saliendo de la vivienda arrastrando la caja fuerte del defensa del Chelsea.
En ella estaban objetos personales como las medallas obtenidas como reconocimiento a la consecución de la edición pasada de la Copa y Supercopa de Europa con el equipo londinense y la Eurocopa, como finalista con Inglaterra.
La investigación sigue abierta para descubrir a los atracadores, aunque ya hay algunos indicios. "Tenemos pistas firmes de quiénes son los atracadores. Nos estamos acercando a ellos", asegura James en sus redes sociales.
Por suerte, no había nadie en la casa en el momento en el que se cometió el golpe, por lo que no hay que lamentar ningún daño personal.
