José María Giménez, jugador del Atlético de Madrid, perdió por completo los papeles una vez que Uruguay quedó fuera del Mundial de Qatar en fase de grupos a pesar de ganar a Ghana. Corea del Sur, que logró el triunfo ante Portugal, les noqueó de un torneo en el que tan solo anotaron dos dianas y tras el que acabaron con un monumental cabreo.

Todo por una acción en la que los jugadores celestes reclamaron penalti a Cavani en el descuento tras una jugada que el trencilla, el alemán Daniel Siebert, ni tan siquiera fue a revisar al VAR. De haber anotado la pena máxima, Uruguay habría estado en octavos.

Pero ninguno de esos hechos se produjo y, por primera vez en 20 años, la Celeste se queda fuera de un Mundial en la fase de grupos.

Con Edinson Cavani rompiendo directamente la pantalla del VAR, Giménez se fue directo hacia el colegiado en una acción que las cámaras captaron al completo.

"Manga de ladrones. Son todos unos ladrones hijos de p***. Sí, sí. Grábame. La c*** de su madre", dijo tras terminar el duelo.

Luego siguió. Porque Giménez elevó el codo para terminar golpeando a un empleado de la FIFA, tal y como recogieron varios vídeos en redes sociales.

Puede suponer, tanto por las palabras como por su acción con el delegado de la FIFA, una sanción jamás vista en el fútbol para el jugador del Atlético.

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