Poco importa el dinero ganado, los goles anotados o los triunfos cosechados: la educación y los valores, se tienen o no se tienen. Simple.

Y por eso el gesto que ya se ha vuelto viral del campeón de Europa Sadio Mané al viajar con su selección, Senegal, es un auténtico ejemplo de los valores positivos.

La estrella del equipo baja del autobús, como el resto de sus compañeros, pero mientras todos observan cómo el utillero tiene dificultades para trasladar la gran cantidad de agua necesaria, es el jugador del Liverpool el que decide agacharse y ayudar a su compañero de trabajo.

Todo un ejemplo de humildad, sin duda, que muchos se deberían aplicar.