Después de que el Gobierno francés, encabezado por Emmanuel Macron, suspendiera toda actividad deportiva profesional hasta el 1 de septiembre, la Liga Francesa y la Federación Francesa de Fútbol se han reunido y han decidido zanjar la Ligue 1 tal y como se encontraba.

De esta manera, el París Saint-Germain, con 12 puntos de ventaja sobre el Olympique de Marsella, se proclama campeón de la competición doméstica. Además, su estrella Kylian Mbappé compartirá trofeo pichichi junto a Ben Yedder tras haber marcado ambos jugadores 18 goles durante este ejercicio.

En la línea europea, el Olympique de Marsella disputará la Champions League y el Stade de Rennes de Eduardo Camavinga (seguido de cerca por el Real Madrid) se la jugará en la previa. Por su parte, el Lille, que se encontraba a un punto del Rennes, irá a Europa League junto al Reims y el Niza, quinto y sexto clasificado respectivamente. El gran damnificado será el Olympique de Lyon, que queda fuera de todo al no poder disputarse la final de la Copa de la Liga contra el PSG.

En cuanto a descensos y ascensos, se elimina la promoción, por lo que bajan y suben dos equipos: Lorient y Lens sustituirán al Toulouse y al Amiens en la máxima categoría del fútbol francés.

Quedará por ver si el resto de ligas europeas toman el ejemplo de Francia y Holanda, o por el contrario deciden terminar la temporada o que esta quede cancelada. En Inglaterra el campeonato está visto para sentencia con el Liverpool como virtual campeón, sin embargo, tanto LaLiga como la Serie A se encuentran muy disputadas y una decisión de este calibre traería mucho revuelo y quejas. El Gobierno, Tebas y Rubiales tendrán la última palabra en España.