Antoine Griezmann ya está aquí. Le esperaban todos en el Atlético de Madrid y, por fin, ha llegado. En el momento más complicado, cayendo en Milán, apareció el galo con un gol que significó el comienzo de la remontada ante el AC Milan.

Fue Luis Suárez el que anotó el tanto decisivo en el descuento desde el punto de penalti. Una victoria sellada fundamental para los de Simeone, que se colocan con cuatro puntos tras dos jornadas.

La historia empezó con un guion muy diferente. Tras varios milagros consecutivos de Jan Oblak, el Milan encontró el gol que tanto merecía en el inicio. No llegó el guardameta rojiblanco al disparo de Rafael Leao tras la jugada de Brahim Díaz en la frontal del área.

El Atleti encontró su oportunidad al quedarse con uno más a la media hora de juego. Kessie se marchó a la caseta por doble amarilla y Simeone cambió el plan poniendo a Joao Félix en el campo y retrasando a Marcos Llorente al lateral.

Atacó el Atleti de manera insistente, todo el rato en terreno de juego del cuadro de San Siro. Griezmann y Thomas Lemar pusieron más pimienta en el ataque de los rojiblancos mientras el Milan se defendía con uñas y dientes.

Y fue Griezmann, a quien esperaban todos los rojiblancos, quien empató el encuentro. Por fin el galo se estrenó en su regreso al Atleti tras el paso por el Barça de dos temporadas.

En el 93 Suárez perforó la portería del Milan desde el punto de penalti. Un gol fundamental que podría suponer alejarse de los fantasmas en esta fase de grupos de la Champions. Con este Griezmann, que por fin apareció, todo es posible para el Atleti.