El pasado 7 de julio Ivan Zaborovski, portero ruso de 16 años, fue alcanzado por un rayo. Se quedó inmóvil en el césped, auxiliado por sus compañeros. Y casi un mes después ha mostrado las quemaduras y ha relatado el terrible momento.
"Mis pulmones... era difícil respirar", explica el portero del Znamya Truda, equipo con el que ahora ha firmado un contrato profesional. Su gran sueño.
Su entrenador le salvó la vida. Al verle desplomado en el césped, acudió hacia él y le practicó un masaje cardíaco y técnicas de respiración artificial. "Corrimos hacia él cuando lo vimos desplomado en el suelo boca abajo", cuenta.
Las imágenes en las que se podía apreciar cómo era alcanzado por el rayo fueron difundidas por el propio equipo. E Ivan ha mostrado las quemaduras. "Estoy mejorando cada vez más", afirma.
Tras conseguir salir del coma y volver a los terrenos de juego, este jovencísimo portero ya sólo piensa en una cosa: llegar al fútbol profesional. De momento ya ha dado el primer paso.
