Si el Barça se pensaba que porque el Real Madrid estuviera lejos tenía la Liga en el bolsillo se equivocaba. Se equivocaba porque aunque los blancos estén lejos, el Atlético no se despega. No tiene intención de hacerlo. Los rojiblancos, en uno de sus partidos más solventes del curso, han derrotado por 2-0 a un Athletic que apenas hizo para sacar algo positivo del Wanda Metropolitano. Gameiro y Diego Costa, en la segunda parte, marcaron para que el equipo de Simeone siga a siete puntos del liderato.
Dominador salió el Atlético. Dominador y con la idea clara de buscar a Kepa. De presionar a una insegura zaga vasca que sufrió bastante cuando tenía que sacar el balón jugado. Los rojiblancos controlaron por completo el partido, sin notar ni un ápice las menos de 72 horas de descanso tras el duelo de Europa League, como el Athletic, y el viaje a Dinamarca.
Los de Ziganda sí notaron sin embargo su encuentro europeo. Espesos, con algunos errores con y sin el balón, y sin apenas crear ante el Atlético. Sin preocupar en exceso a un combinado, el de Simeone, que apenas dejaba a su rival avanzar más allá del mediocampo. Thomas, imperial, y Griezmann, incansable y comprometido, sumaron kilómetros y kilómetros en sus piernas.
Y Diego Costa sumaba un nuevo penalti a favor del Atlético no pitado por el colegiado. Ya son 24 jornadas disputadas, 24 en las que, ni por acierto ni por error, suma el equipo de Simeone una pena máxima. El 18 bien podía haberse ido a la calle en una acción posterior, tras hacer un feo gesto al línea que el árbitro resolvió con amarillla.
Poco hubo del Athletic, salvo una acción de Williams que Lucas resolvió en lo que podía haber sido penalti para los de Ziganda. El central se lesionó en la acción, y no salió de vestuarios en el descanso para que fuera Godín el que ocupara su puesto. Ninguno tuva mucha exigencia por parte de una delantera del Athletic en la que no estaban ni Aduriz ni Raúl García.
Sí estaba Gameiro, este en el banquillo. El francés salió en el segundo acto por Koke, y la primera que tuvo la convirtió. Si Diego Costa se estrelló con Kepa con una buena volea, el galo volvió a hacer letal la conexión con Griezmann. Antoine suma una nueva asistencia, la que le dio a su compatriota para que de un tiro cruzado hiciera estéril la estirada del arquero vasco.
Ya tenía su gol el Atleti, y eso, con este equipo, es tener ya casi hecho el camino para la victoria. El Athletic no despertó, ni atacó ni subió la intensidad en defensa, y eso lo aprovechó Diego Costa. Esta vez sí acertó el 18, tras un fallo grave en el despeje a un pase de Gameiro por parte de Núñez. Diego se plantó solo ante Kepa y, con un tiro potente por el palo del portero, celebró un nuevo gol en el Metropolitano... esta vez sin tarjeta.
No hubo sufrimiento en el Metropolitano en esta ocasión. Dos goles fueron ventaja suficiente para que la parroquia atlética viviera tranquila y relajada desde sus asientos el final de un encuentro que supone tres nuevos puntos para el Atlético. Para un equipo que no da su brazo a torcer en esta Liga.