El derbi de este sábado en el Wanda Metropolitano será más 'capital' que nunca. Y es que tanto Atlético de Madrid como Real Madrid se juegan mucho en un duelo marcado por las urgencias. A ocho puntos del Barcelona, líder de la Liga, ambos saben que todo lo que no sea ganar les complicaría mucho, siempre que los del Valverde ganen en Butarque, sus opciones al campeonato liguero.

Si bien el Real Madrid está más obligado a pelear por el título, el Atlético de Simeone está en deuda con su afición tras algunas malas noches (Chelsea, Qarabag, Villarreal, Barcelona...) en el Wanda Metropolitano.

Y es que desde su mudanza de estadio, el Atlético todavía no ha vivido una gran noche como local en su nuevo estadio. Con la clasificación para octavos de la Champions más complicada que nunca, el conjunto rojiblanco sabe que debe mejorar sus prestaciones ante una afición que acude de forma fiel con la fe de ver una mejora en el juego del equipo.

Simeone, tras varias campañas exitosas al frente del Atlético, pasa quizá por uno de sus peores momentos como técnico rojiblanco. Las prestaciones del equipo han bajado un escalón en comparación con años anteriores y algunos jugadors clave como Griezmann, Godín o Carrasco no están ofreciendo su mejor versión. Por la recuperación de sus piezas clave pasa la reacción de un equipo que sabe que el derbi puede ser un punto de inflexión en el temporada.

No le van mejor las cosas a Zidane en el Real Madrid. Si bien es cierto que su equipo arrancó la temporada como un tiró y ganando Supercopa de España y de Europa ante Barcelona y Manchester United, sus prestaciones han estado desde ese momento lejos de lo esperado.

Sus tropiezos ante Valencia y Levante, y sobre todo las derrotas antes Betis, Girona y Tottenham han disparado las alarmas en el Real Madrid. La desventaja de ocho puntos con el Barcelona es un problema y una presión con la que juega el Real Madrid cada jornada. Un tropiezo en el derbi le podría colocar a una distancia casi insalvable pese a estar en noviembre.

Y es que esos malos resultados han sido un reflejo de sus dudas en el juego, acrecentadas tras sus derrotas en Girona y Wembley. En los dos partidos se vio por primera vez desde la llegada de Zidane al banquillo a un equipo apático y resignado a su suerte durante algunas fases.

El mal momento de Atlético de Madrid y Real Madrid ha coincidido con la crisis goleadora de sus 'killers': Griezmann y Cristiano Ronaldo. En este punto también comparten diagnóstico los dos conjuntos. Griezmann solo suma dos goles en nueve partidos mientras que Cristiano ha anotado un solo tanto, aunque solo ha disputado siete partidos al perderse las cuatro primeras jornadas por su sanción en la Supercopa de España.