A sus 31 años, Tommaso Berni se convirtió en nuevo portero del Inter de Milán. Fue en el verano de 2014. Y, desde entonces, no ha disputado ni un solo minuto con esa camiseta, siendo suplente del indiscutible Samir Handanovic.

Pero Berni, además de acumular seis años sin ponerse debajo de la portería, acumula otro registro que ha llamado la atención al mundo del fútbol y ha sido tendencia en redes sociales en las últimas horas: ha visto dos tarjetas rojas sin haber disputado un solo minuto.

Y es que al guardameta es habitual verle protestar tanto al cuarto árbitro como al juez de línea más cercano a los banquillos. Gesticula, se levanta y grita. Sobre todo grita. Y los árbitros ya le tienen tomada la medida.

El pasado domingo, en el encuentro del Inter de Milán ante el Parma (en el que se llevó la victoria por 1-2), Berni vio la segunda tarjeta roja desde que es jugador del equipo ahora dirigido por Antonio Conte.

En el tanto del Parma, todo el banquillo visitante pidió falta previa. Y el que más protestó, como casi siempre, fue Tommaso, que inmediatamente después enfiló el túnel de vestuarios.

Su segunda expulsión en seis años. Su segunda expulsión sin haber disputado un solo minuto con la camiseta del Inter. Un récord extraño para este veterano portero.