El Barça ha pinchado ante el Rayo Vallecano. Los culés han perdido contra los rayistas en el Camp Nou y han dejado más que abierta la posibilidad de que el Real Madrid se proclame campeón de LaLiga en la próxima jornada.

Y no es que tenga que sacar un resultado complicado. Los blancos reciben al Espanyol en el Santiago Bernabéu, y un empate, un punto, les sirve para conquistar LaLiga cuando aún restarían cuatro partidos por jugarse.

Porque ahora la distancia es de 15 puntos. La única razón por la que los blancos no están ahora festejando el título es por el 'golaverage'. Por el 0-4 que logró el Barça en el Santiago Bernabéu en un día en que los culés se permitieron soñar con LaLiga.

Un sueño fue y es, porque los posteriores resultados de ambos equipos han acrecentado la diferencia entre madridistas y azulgranas. Con sumar un punto el título será suyo, y claro está de ganar al Espanyol también lograrían LaLiga.

En caso de perder contra el Espanyol, el Real Madrid debe esperar otros resultados. Necesitan, si no suman, que el equipo de Xavi tampoco lo haga. Si los culés caen contra los insulares en casa LaLiga es madridista.

Y el morbo del posible pasillo al campeón en el Metropolitano también, porque el próximo rival de los madridistas tras el Espanyol es el Atlético.