El conflicto bélico entre Ucrania y Rusia está provocando situaciones desoladoras. Una historia difícil es la que está viviendo Eric Ramírez, jugador del Sporting de Gijón, que llegó cedido al club asturiano en el mercado invernal desde el Dinamo de Kiev, teniendo que dejar a su mujer embarazada en la capital ucraniana.

El joven delantero venezolano ha intentado durante varios días que su mujer pudiera viajar hasta España, pero finalmente ha tenido que esperar a que se produzca el parto en Ucrania. Ramírez se pasó por los micrófonos de 'El Carrusel Deportivo' de la 'Cadena Ser' para relatar su situación actual.

"Estoy más tranquilo, fue una semana bastante complicada en lo personal, pero tanto mi mujer como mi hija están bien. Hay que esperar a la decisión de los médicos, pero espero tenerlas pronto conmigo", comenzó.

Los hospitales en Ucrania, ante el miedo por los ataques rusos, están movilizando a varios pacientes a diferentes sótanos: "Es un lugar bastante seguro hasta el momento", señala el jugador tras confesar que su mujer y su hija, a la que todavía no ha podido conocer en persona, permanecen en estos momentos en uno de ellos.

Además, agradece a su mujer cómo está llevando una situación tan complicada: "Me ha transmitido mucha tranquilidad. Hablo con ella todos los días y me dice que está mejorando. A mi hija la veo por videollamada y es súper lindo. Es una emoción que te hace vivir".

El futbolista ha reconocido que se habían oído algunos rumores de que Ucrania podría llegar a una guerra con Rusia pero nunca creyó que fuera a pasar realmente: "Mientras estuve allí muchos meses se habló de eso, pero nunca paso nada, aunque la situación fuera complicada".

"Esperemos que no solo mi mujer, sino que todas las personas del país salgan de esta situación difícil y puedan volver a la normalidad", concluyó el jugador del Sporting de Gijón.

Ahora, Eric Ramírez continúa a la espera de recibir el alta para poder trasladar a su mujer y su hija hasta España lo antes posible.