Álvaro Cervera tiene muy claro a lo que juega su Cádiz. Da igual el escenario, da igual la situación. Un equipo intenso, ordenado, capaz de convertir el ataque rival en nada.
En San Mamés firmó un ejercicio de supervivencia encomiable. Sobrevivió, con victoria incluida, a pesar de que finalizó el encuentro con dos jugadores menos sobre el verde.
Dio igual la expulsión de Álvaro Negredo y la de Akapo. El conjunto gaditano se llevó los tres puntos de Bilbao, la primera vez que lo consigue en su historia en el campeonato liguero.
Lozano no aparecerá en la estadística del único tanto, pero el mérito fue suyo. Unai Núñez perforó su propia portería tras una gran acción del hondureño. Y todo ello ya con el Cádiz con diez.
Pero incluso con nueve aguantó. Gaizka Garitano sacó de una tacada a Iñaki Williams e Iker Muniain del campo. Una decisión sorprendente. Que tampoco funcionó.
El Athletic se estrelló contra Ledesma y contra el Cádiz. Segunda victoria en cuatro partidos para el equipo de Cervera en LaLiga. Supervivencia por encima de todo.