Karim Benzema fue el gran protagonista del partido que jugaron el Real Madrid y el Valladolid. Karim, y el equipo al completo. Los de Ancelotti, en apenas 40 minutos, sentenciaron el encuentro en un Santiago Bernabéu que vio cuatro goles en la primera parte.

Que vio un golazo. Un tremendo golazo. Fue el 4-0, obra de Benzema. Llegó en el 36, y con razón puso en pie a los presentes y a los que vieron el envite por sus televisores.

Fue Karim además quien prácticamente comenzó todo. Conectó con la bola en línea de medios para descargar bien a Asensio. El balear, tras alzar la cabeza, vio a Rodrygo en la derecha. Y con el brasileño llegó el pase de gol.

Mientras iba encarando a la defensa, Benzema fue desmarcándose para deshacerse de todo marcaje y quedar libre. Con un tremendo escorzo, y de espaldas en una especie de chilena sin levantar los dos pies del suelo, puso con un sutil toque el cuero en las mallas de Asenjo.

Volvió loco al Bernabéu, y era la segunda vez en apenas minutos. Porque si ese gol, el que significó su 'hat trick', fue como fue, el doblete no se quedó atrás. Buena jugada colectiva que acabó con Benzema en la frontal. Tras varios amagos, derechazo y a las mallas.

Se divirtió mucho el Real Madrid ante el Valladolid, y eso que no fue un encuentro sencillo al comienzo. Pero en cuanto anotó Rodrygo el 1-0 todo fue un auténtico aluvión. Del 21 al 36, en apenas un cuarto de hora, cuatro goles.