El caos se ha adueñado este domingo de un área de servicio de Badia Al Pino, cerca de Arezzo, en el kilómetro 364 de la autopista A1 que une Milán y Nápoles.

30 vehículos con hinchas napolitanos se encontraban estacionados en el área de descanso cuando pasaron frente a ellos varias furgonetas con aficionados de la Roma.

Fue entonces cuando los radicales del sur comenzaron a lanzar piedras y bombas de humo, a lo que los romanistas respondieron deteniéndose en el arcén y yendo a pie hacia ellos para iniciar los enfrentamientos.

"Los hinchas bajaron de los coches, encapuchados, con palos, y empezaron a tirar petardos hacia el área de servicio de la autopista, y desde allí respondían tirando otras bengala", informa 'La Gazzetta dello Sport'.

La trifulca entre 300 radicales se ha saldado con un aficionado de la Roma herido leve por arma blanca que ha tenido que ser hospitalizado, además de provocar un atasco de 14 kilómetros en la autopista.

La rivalidad entre las dos facciones ultras viene siendo muy alta desde que en 2014 Daniele De Santis, radical romanista, asesinara a tiros al napolitano Ciro Esposito antes de la final de Copa italiana.

Matteo Salvini, viceprimer ministro, ha condenado los hechos: "Estos no son hinchas. ¿Autopista cerrada y viajeros italianos bloqueados? Que paguen los daños con sus bolsillos y no entren nunca más en un estadio".