El Barça se marcha con ventaja del Santiago Bernabéu. El equipo azulgrana echó la victoria al bolsillo (0-1) y tendrá que hacer valer ese resultado dentro de un mes en el partido de vuelta en su estadio, el Camp Nou.

Fue Militao el que anotó en propia puerta el único tanto del partido. Un tanto que tuvo que validar el VAR por una posición dudosa de Kessie. No estaba en fuera de juego y el Barça se adelantó en el marcador. A partir de ahí, levantó un muro defensivo que el Madrid no supo superar.

El Madrid empezó mandando con la pelota, corriendo a presionar arriba para recuperarla cuanto antes. Sufría el Barça corriendo detrás del balón, pero no necesitó dominar para adelantarse en el marcador. Porque su gol llegó a la contra.

Kessie no estaba en fuera de juego (lo confirmó el VAR), se plantó ante Thibaut Courtois y su rechace tocó en Militao para acabar perforando la portería. Se ponía en cabeza el Barça en el Bernabéu.

Dominaba el Madrid, pero no encontraba la profundidad necesaria. Ter Stegen no tuvo que hacer ninguna parada de mérito. Ancelotti metió a Rodrygo y retrasó a Camavinga al lateral derecho. Quería agitar el árbol el preparador italiano.

El Barça esperaba atrás. Sin complejos para renunciar a la pelota y proteger su resultado. Incluso en algunos momentos con todo el equipo en su propia área. El Madrid no encontraba el hueco y el canterano Álvaro Rodríguez saltó al campo para los últimos diez minutos. Pero tampoco generaba el Madrid para que el joven delantero tuviera alguna oportunidad.

Y el Barça se marcha con ventaja a la vuelta. Asaltó el Bernabéu con un muro defensivo que el Madrid en muchos momentos ni siquiera supo atacar.