El Real Madrid se ha reencontrado con su público en el Santiago Bernabéu. Han pasado 560 días desde la última vez pero, por fin, equipo e hinchada se han vuelto a reunir en el templo madridista, en el renovado templo madridista, en el partido que enfrentó a los de Ancelotti contra el Celta de Vigo.

Ha pasado muchísimo tiempo desde aquel 1 de marzo de 2020. Mucho desde ese Clásico que el Real Madrid ganó ante el Barça por 2-0. Dos Ligas ha habido, una ganada por ellos y otra por el Atlético. Un año y medio de espera en el que los blancos han jugado en el Alfredo di Stefano hasta tener su estadio listo.

Hasta ver cómo el Santiago Bernabéu es lo que es ahora, con una reforma tremenda en una obra que hace del campo madridista uno de los mejores de todo el mundo.

El techado se cubre en 15 minutos con la lluvia, gradas abatibles, césped retráctil... Sí, todo eso tiene o tendrá el campo pues todo ha ido destinado en estos días a que los 25.000 espectadores que pueden entrar en el campo tengan la total y absoluta seguridad en la vuelta al fútbol al feudo merengue.

Sentido homenaje a Lorenzo Sanz

Una vuelta que ha sido contra el Celta, con un recibimiento espectacular por parte de una hinchada que tenía ya muchísimas ganas de volver a ver un partido en casa. Y de rendir homenaje a Lorenzo Sanz, quien fue presidente del club blanco entre 1995 y el 2000 y que falleció el pasado año por coronavirus. Sentido minuto de silencio en su memoria y en la de todos los fallecidos por COVID.

Mucho ha pasado desde ese 1 de marzo. Mucho ha sucedido en estos 18 meses desde el último día de trabajo en el Santiago Bernabéu.

Aplausos, vítores, cánticos, apoyo, presión para el rival... Un recibimiento por todo lo alto de la afición para un equipo que tiene un curso por delante en el que reconquistar LaLiga, y en el que al menos pelear hasta el final por todo título que dispute. Como cada temporada.