La causa abierta por el accidente de tráfico en el que falleció José Antonio Reyes, ocurrido el 1 de junio de 2019, ha sido finalmente archivada por el Juzgado de Instrucción número 3 de Alcalá de Guadaíra.

En un auto dictado el pasado 25 de mayo, el juez decreta el archivo por sobreseimiento sin perjuicio de las acciones civiles que pudieran corresponder, según ha informado la agencia 'EFE'.

Fue la propia Fiscalía quien, pese a apreciar indicios de que el futbolista cometió dos delitos, pidió el archivo de la causa debido a que el responsable había fallecido, lo que imposibilitaba la acción penal.

El accidente ocurrió en la autovía A-376 entre Sevilla y Utrera cuando Reyes volvía de Almendralejo (Badajoz) después de entrenarse con el UD Extremadura y falleció él junto a su primo Jonathan Reyes. El único superviviente fue Juan Manuel Calderón.

El Ministerio Público vio indicios de la comisión de un delito de homicidio con imprudencia grave y otro de lesiones también por imprudencia grave, según informó la Fiscalía Superior de Andalucía. También apreció que Reyes infringió "las mínimas y elementales precauciones" y cometió una "infracción grave de las normas de circulación y los deberes normativos de cuidado de la Ley de Tráfico".

El accidente se debió a la suma del exceso de velocidad, 67 kilómetros por encima del límite como mínimo, y al reventón del neumático trasero, lo que provocó que Reyes perdiese el control del coche.

Los informes señalaban que el vehículo iba a "una velocidad de 187 kilómetros en el momento de interaccionar con la valla", aunque "en el momento preciso de reventar el neumático debió llevar una velocidad superior". La carretera se encontraba en buen estado de conservación y existía una señalización con limitación de velocidad genérica a 120 kilómetros en ese tramo, recto y de doble calzada.