Una victoria del Real Madrid que acabó con malísimas noticias. Sobre todo viendo el calendario de los blancos. Dos de sus futbolistas más diferenciales cayeron lesionados: Militao en la primera mitad y Karim Benzema en la segunda. En ambos casos parecían problemas musculares. El Mundial de Clubes llega en apenas una semana.

Eso dejó helado a un Santiago Bernabéu que hasta entonces disfrutaba. Marco Asensio abrió la lata con un chut espectacular y Vinicius hizo el segundo. Todo ello después de la polémica por el tanto anulado a Rudiger.

Hasta tres tuvo Asensio en una primera mitad frenética. Una de ellas con asistencia a lo Guti de Karim Benzema. El galo la dejó atrás, pero Asensio se encontró con la defensa de Valencia. Antes Mamardashvili evitó que inaugurara el marcador en un disparo cruzado.

El Madrid se metió en problemas con la lesión de Militao. A una semana del Mundial de Clubes, Ancelotti pierde a su central puntero. Nacho, comodín en defensa, pasó al central y salió Dani Carvajal.

La polémica llegó al filo del descanso. Rudiger marcó, pero el colegiado se marchó a la pantalla a revisar una falta de Benzema sobre Musah. El galo le puso el codo en el cuello y le tocó cuando se estaba cayendo. El árbitro decidió que el gol no valía y que Benzema merecía la falta.

Y toda la mala suerte que tuvo Asensio en la primera mitad desapareció en la segunda. Su disparo favorito, escorado con la izquierda. Así encontró la escuadra de la portería del Valencia. Un auténtico golazo. Se desataba el Real Madrid.

Vinicius, a la carrera, como más le gusta, hizo el segundo. Cabalgó por la izquierda y definió al palo largo de Mamardashvili. Bailaba una noche más el brasileño en el Bernabéu.

Con el Madrid desatado en ataque, volvieron las malas noticias en forma de lesiones. En esta ocasión, Benzema. Renqueante le cedió el brazalete de capitán a Nacho y se acercó a la banda para esperar el cambio. Esperó Rodrygo Goes en su lugar.

Roja a Paulista

Gabriel Paulista perdió los papeles con una entrada feísima sobre Vinicius y vio la roja directa. El árbitro no se lo pensó un segundo. El propio Vinicius, Rodrygo y Militao cuando llegaba al túnel le recriminaron la acción.