El ciclista irlandés Sam Bennett (Bora-Hansgrohe) se ha llevado la séptima etapa del Giro de Italia, disputada entre las localidades de Pizzo y Praia a Mare sobre 159 kilómetros, al imponerse al sprint al italiano Elia Viviani (Quick-Step Floors), mientras que el británico Simon Yates (Mitchelton-Scott) conserva el liderato.
Bennett, cuarto irlandés en ganar una etapa en la ronda transalpina y primero en conseguirlo desde que lo hiciera en 1987 Stephen Roche, 'robó' la victoria a Viviani en la volata final, donde el italiano pagó el esfuerzo de haber liderado al pelotón en los últimos kilómetros.
Con la llegada en grupo, la clasificación se mantiene sin cambios, por lo que Yates seguirá vistiendo la 'maglia rosa' al defender los 16 segundos de ventaja sobre el holandés Tom Dumoulin (Sunweb) y los 26 sobre el colombiano Esteban Chaves (Mitchelton-Scott), segundo y tercero de la general.
Tras la dura ascensión al Etna del jueves, los ciclistas pudieron recuperarse en una etapa prácticamente llana por la región de Calabria.
Sin embargo, el pelotón apenas había recorrido dos kilómetros cuando se fraguó la escapada del día, con los italianos Davide Ballerini y Fausto Masnada (Androni Giocattoli-Sidermec) y el español Markel Irizar (Trek-Segafredo).
Sin embargo, con el paso de los kilómetros Masnada se cayó del trío y se sumó a él el ruso Maxim Belkov (Katusha), que cogió el testigo de su compañero Tony Martin, que había tratado de irse en solitario nada más dar comienzo la prueba. Los tres llegaron juntos con un altísimo ritmo, de más de 40 km/h, a Amantea, donde atesoraban más de dos minutos de ventaja sobre el grueso de los ciclistas.
A 80 kilómetros para meta, el pelotón comenzó a trabajar para dar caza a los escapados, reduciendo su renta a algo más de un minuto y medio. Mientras, Ballerini se adjudicaba el sprint intermedio de Guardia Piemontese Marina por delante de Belkov y de Irizar. Las dudas en el grupo perseguidor permitieron a los tres seguir escapándose.
Sin embargo, en el suave ascenso a Scalea se inició su neutralización, que corrió a cargo de LottoNL-Jumbo y Trek-Segafredo; a 16 kilómetros, su ventaja era sólo de 13 segundos, lo que vaticinaba la llegada masiva, y a menos de 10, tras un amago de formarse un grupo delantero, quedó completamente anulada la aventura.
En la entrada en los túneles finales antes de entrar en Praia a Mare, el pelotón empezó a estirarse y, a falta de un par de kilómetros el italiano Elia Viviani (Quick-Step Floors), portador de la 'maglia ciclamino' del líder de la clasificación por puntos, se puso en cabeza en busca de una victoria al sprint, su especialidad.
Se las prometía felices, pero casi sobre la línea de meta apareció Bennett para arrebatarle la victoria y firmar su primer triunfo en una gran vuelta. El italiano Niccolò Bonifazio (Bahrain Merida) completó el podio de la jornada, sin cambios en la clasificación por la llegada en grupo.
La ronda continuará este sábado con la disputa de la octava etapa, de 209 kilómetros entre Praia a Mare y Montevergine di Mercogliano, segunda llegada en alto de la carrera con una pendiente promedio del 6%.