El ciclista británico Chris Froome ha declarado estar "sin palabras" tras la contrarreloj de este sábado que ha hecho que, salvo catástrofe en el paseo de los Campos Elíseos, haya conseguido su cuarto Tour de Francia, lo que le coloca como quinto en la historia con más rondas galas, solo por detrás de Jacques Anquetil, Eddy Merckx, Bernard Hinault y Miguel Indurain.

"Estoy sin palabras. Es una sensación increíble. Fue muy justa la clasificación hasta esta crono. Estoy muy contento de ganar de nuevo", explicó el británico. Según Froome, este ha sido su Tour "más ajustado" y se ha mostrado sorprendido con cómo se llegó a la contrarreloj de Marsella después de que sus tres anteriores maillots amarillos los consiguiera con muchísima más superioridad y claridad.

"Este ha sido mi Tour de Francia más ajustado, la lucha más dura entre los corredores de la clasificación general. No pensé que se llegaría así a la contrarreloj de Marsella, pero así ha sido y había un poco de presión, pero para mí es siempre bueno sentir la presión", finalizó.

Froome, que llegaba a la penúltima etapa con Romain Bardet y Rigoberto Urán pisándoles los talones, dio un puñetazo encima de la mesa con una exhibición en la 'crono' quedándose a tan solo seis segundos del polaco Maciej Bodnar, vencedor de la jornada, y dejando a Urán a 25 segundos y a Bardet a casi dos minutos.