Los Golden State Warriors son los nuevos campeones de la NBA. El equipo de la Bahía, liderado por un colosal Stephen Curry, pasó por encima de los Boston Celtics firmando tres victorias consecutivas para conquistar su cuarto anillo en apenas ocho temporadas.
En ocho años que les hacen ser, junto con los Chicago Bulls, la dinastía más dominadora del baloncesto moderno. Junto con esos seis anillos de Michael Jordan, los cuatro de Stephen Curry, que por fin logró además ser el MVP de unas finales en la NBA.
Mucho cansancio, tanto mental como físico, en los Celtics. En unos Celtics que dejaron fuera a Bucks y a Heat, y que perdieron tres partidos consecutivos contra Warriors. El último, de nuevo, con un festival de pérdidas que hizo inviable cualquier opción de victoria.
Entre las pérdidas... y Curry
Fueron 22, y aunque tuvieron una ventaja inicial de 12 puntos los Warriors fueron imponiéndose en el Garden. Al descanso, 33-54. Y al final del tercer cuarto, 50-72. La reacción final quedó en nada.
Fueron Al Horford y Robert Williams los que hicieron lo que pudieron, con un Jaylen Brown que de nuevo estuvo muy por encima de Jayson Tatum gracias a sus 34 puntos. Y en esas, Stephen Curry.
El MVP de las Finales, por fin. Firmó 34 puntos, y después de una errática noche desde la línea de tres en el quinto partido esta vez fueron 6 de 11 en triples.
No pudieron, o no supieron, defender a Curry. Tampoco el rebote, donde Kevon Looney impuso su ley. Y es que la fijación de Boston con el 30 ni surtió efecto con él ni con el resto de los Warriors.
MVP para Curry
Así, cuarto anillo y primer MVP para Curry. Para un jugador que ha llevado la NBA a la línea de tres y que es el jugador con más triples anotados en la historia de la NBA. Sin Kevin Durant, los Warriors también saben ganar.
También han sabido ganar. Cuatro anillos en ocho temporadas, y son, tras una gran temporada y unos 'playoff' en los que han hecho valer su experiencia, campeones de la NBA 2021-22. No hizo falta llegar al séptimo partido.