Sergio Llull ha sido el MVP de la final de la Supercopa entre Real Madrid y Barcelona, y con razón. El club madridista remontó una diferencia de 19 puntos a los culés con un balear estelar que acabó el encuentro con 24 puntos.

Tras el encuentro no pudo ocultar su alegría y unas lágrimas de emoción de alguien que sabe lo que es sufrir a nivel personal por las lesiones.

"Han sido años complicados a nivel persona. Sobre todo físicamente. Un partido bueno, y ayudando al equipo a ganar. Eso es lo importante", dijo en las cámaras de Movistar.

Llull, además, tiene claro en quién pensó tras el trabajado triunfo madridista: "En mi familia. En mi mujer, mis padres, mi hermano... Ayer discutí con mi mujer porque estaba enfadado por no jugar bien".

"Y también en todos los que están detrás del equipo. Los que no salen tanto en las cámaras. Fisios, utilleros...", prosigue Llull.

El jugador del Real Madrid tiene claro cómo se ha cimentado la remontada blanca: "Cuando peor están las cosas damos un paso adelante".

Para terminar, habla de Carlos Alocen: "Está trabajando más que nadie. A veces cuando eres joven es complicado tener opciones en un equipo como esté, pero si sigue así llegará lejos".