El FC Barcelona Lassa ha ganado a Olympiacos (73-51) en el Palau Blaugrana, en la quinta jornada de la Fase Regular de la Euroliga, para acabar con su racha de cinco derrotas consecutivas contando las de la Liga Endesa y romper a los del Pireo, que llegaban invictos a una cita donde el Barça Lassa sonrió hasta el final gracias a una intensidad defensiva añorada y reencontrada.

Un 0-6 de inicio para Olympiacos, sumado a la acción de protesta de un silenciado Palau Blaugrana contra el encarcelamiento del Govern cesado, hizo presagiar una dura noche para un Barça Lassa que necesitaba la victoria sí o sí. Quizá por ello, quizá por el 'subidón' de adrenalina y confianza que a buen seguro supuso los jugadores el aliento festivo de su afición tras la reivindicación, los de Sito Alonso reaccionaron.

El resultado final fue además la máxima diferencia del equipo catalán en un partido en el que fue de menos a más, en el que se fue quitando la presión de encima y a base de buenas defensas y acierto arriba desquició a unos griegos que todavía no habían saboreado la derrota en esta Euroliga, que siguen sin su líder y guía Vassilis Spanoulis y que sumaron 21 pérdidas.

Sin duda las 14 recuperaciones del Barça, 3 de ellas de Phil Pressey, ayudaron a desquiciar al rival. Además, el recital de juego ofensivo fue tan repartido como apabullante con 21 asistencias, 10 de ellas a cargo de sus bases Pressey y Thomas Heurtel con 5 para cada uno. Buen juego, solidaridad, intensidad y actitud para hacer vibrar el Palau y vencer a un Olympiacos amilanado.

El primer cuarto ya lo lograron 'neutralizar' (14-14) los blaugranas pese a ir a remolque, y en el segundo fueron haciendo 'colchón' y sentando las bases del triunfo con Pressey activando a los suyos desde atrás. Quizá sea el más criticado el base estadounidense, que en la mala racha de derrotas ha aportado poco, pero su intensidad defensiva fue el impulso para la recuperación de esta noche en todos los sentidos.

Eso sí, la fase ofensiva no es su fuerte. Ahí aparecieron Pierre Oriola o Kevin Seraphin, aunque esta noche la aportación en ataque fue colectiva. A un marcador bastante bajo, no hubo nadie que se saliera del molde pero todos aportaron su 'granito de arena' para acabar con el hasta ahora intocable Olympiacos.

La prueba, el reto, era mayúsculo dada la situación previa y los de Sito Alonso lo superaron con muy buena nota, con un último cuarto de manual defensivo y efectividad y acierto en el aro contrario. Un parcial final de 24-10 para volver, tras cinco derrotas, a la senda del triunfo y ponerse 3-2 en esta Fase Regular, por el 4-1 de un Olympiacos que deja de ser equipo invicto.

Este partido fue el del regreso de Rakim Sanders y Víctor Claver al equipo. El alero estadounidense sufría una lesión en su muñeca derecha desde mediados de octubre que le había impedido debutar en la Euroliga, mientras que Víctor Claver hizo su debut esta temporada tras una larga ausencia de cinco meses fruto de una lesión en el menisco externo de la rodilla izquierda que le obligó a pasar por quirófano a finales de mayo.