Hay poco equipos comparables a los Golden State Warrios de los años 2016 a 2019. La franquicia californiana juntó a un grupo de talentos que dominaron la NBA con mucha superioridad durante varios años. Los Warriors conquistaron dos anillos consecutivos (2017 y 2018) y llegaron a las Finales de 2019.

Kevin Durant y Stephen Curry fueron los grandes artífices del éxito de Golden State y acompañados de Klay Thompson, Harrison Barnes, Draymond Green, Andrew Bogut y André Iguodala, entre otros, se convirtieron en dueños y señores de la NBA.

En la temporada 2016-2017, aquel equipo firmó uno de las mejores actuaciones que se recuerdan en play-offs, firmando dieciséis victorias y solo una derrota (en las Finales, contra los Cavaliers de Lebron James y Kyrie Irving).

La superioridad era incontestable y André Iguodala, jugador de aquel plantel de ensueño, ha analizado en el podcast 'Par 3' como era ese equipo por dentro: "Cuando estábamos en nuestro apogeo, cuando teníamos a Durant y sabíamos que íbamos a ganar todos los partidos, entrenábamos a las 11 de la mañana… pero el entrenamiento duraba 20 minutos".

"Era solo 'muy bien, asegurémonos de que estamos todos en la misma onda, vamos a preparar un par de jugadas nuevas y a ver algunos vídeos'. No entrenábamos más". ha añadido.

Iguodala ha aprovechado para explicar como era su día a día en aquellos Warriors. Sorprendentemente, el estadounidense ha destacado la suavidad que caracterizaba sus entrenamientos.

"Yo iba a las instalaciones a las ocho y media, desayunaba y a las nueve iba a hacer pesas al gimnasio. A las diez salía a la pista y hacía mi entrenamiento personal. Tiraba, preparaba mi físico... todo lo que necesitaba. A las doce menos cuarto estaba en el coche y a las doce y cuarto estaba jugando al golf", ha asegurado 'Iggy'.

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