La chica de ayer, El sitio de mi recreo y Lucha de gigantes son sólo tres de las muchas canciones que Antonio Vega nos regaló. Desde finales de los años 70, este músico de aspecto melancólico y voz rota no dejó de componer, lo hizo hasta convertirse en un referente de la música pop.

Antonio se presentó en los 80 con Nacha Pop, y compartiendo liderazgo junto a su primo Nacho, nos deleitaron con temas como La chica de ayer y protagonizando una carrera llena de éxitos, que aún hoy lo son.

En 1988, Antonio Vega dio su último concierto como integrante de Nacha Pop, aunque ya nada podía impedir que empezara su carrera como solista, que no en solitario, como explicaban sus propios compañeros, porque Antonio nunca podía dejar de ayudar. En 2007, la banda se volvió a unir hasta el fallecimiento del cantante.

Tenía motivos ilimitados para presumir, como talento, amigos o fans, pero su carácter nunca fue ese, sino el de ser un hombre sencillo y tímido al que resultaba muy difícil no querer, según comentaban los más cercanos al artista.

En el séptimo aniversario de su muerte, en las redes sociales se pueden encontrar innumerables muestras precisamente de esto, y es que sus incontables fans se han volcado en homenajearle, como cada año.