La sala madrileña Joy Eslava, más viva que nunca 35 años después
"Quieto todo el mundo", la mítica frase de Tejero en su intento de golpe de Estado en el Congreso de los Diputados no debió llegar a los dueños de la Joy Eslava. Al día siguiente, abrieron la discoteca y muy pronto se convirtió en todo un símbolo de la movida madrileña. La discoteca sobrevivió a un incendio en los años 90 y 35 años después de su apertura, Joy Eslava sigue en activo, con un valor histórico sentimental difícil de calcular.
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