La vida de Priscilla Ann Beaulieu, de 14 años, cambió al toparse con Elvis Presley, un joven de Tupelo (Mississipi) convertido en estrella del rock y actor que había conocido ya años antes. Coincidieron en 1958, cuando en el cénit de su carreta, Elvis fue llamado a filas por el ejército y destinado a Berlín occidental. Ella sabía quién era. Pero no era seguidora. La joven vivía temporalmente en Alemania occidental con la pareja de su madre, el mismo hombre del que acabó heredando el apellido.

Su padre, el biológico, había fallecido en un accidente aéreo cuando tenía unos meses de edad. Antes de conocer a Priscilla, Elvis se enfrentó a la pérdida de su madre. De hecho, peleó hasta conseguir un permiso especial para volver a Estados Unidos y despedirse de ella. Lo consiguió. En los años siguientes, coincidieron en fiestas que ella organizó en su casa. Sin embargo, Elvis regresó a Estados Unidos porque había terminado sus obligaciones militares.

La relación se complicó en los años siguientes por los continuos viajes de él, según recoge el libro 'Elvis Presley' de Adolfo Pérez Agustí. Los padres de ella no apoyaban la idea de que la joven viajase con él. Pero finalmente consiguieron que Priscilla lo acompañase a Hollywood, donde vivió sus primeras fiestas del mundo de la música y el cine.

Los padres acabaron cediendo y se mudó a Memphis. Antes cumplió con una promesa: matricularse en un colegio católico para seguir con sus estudios. A la familia de ella no le gustaba Elvis como pareja. A sus profesoras tampoco, pues lo consideraban muy mujeriego. Durante su etapa en el centro, ella se vio obligada a centrarse en sus estudios mientras Elvis siguió con sus actuaciones y fiestas. Ella consiguió aprobar todo y graduarse, una noticia que celebró con Elvis. Pero la preocupación de los padres siguió ahí.

Cinco años casada con Elvis Presley

Al parecer, la familia de ella les dio un ultimátum: o se casaban o lo dejaban. El manager del cantante aprovechó la boda para que se hablase de Elvis y organizó todo a lo grande. El aspecto había cambiado por completo. Dicen que fue Elvis quien se encargó de perfilarlo, escogiendo su peinado, vestuario y maquillaje. Un año después de su boda, Priscilla Presley dio a luz a su única hija, Lisa Marie Presley. Para entonces, la carrera del artista iba hacia abajo y empezó a sumergirse en una depresión. Mientras, su médico empezó a recetarle anfetaminas.

La pareja duró casada cinco años. Se divorciaron, finalmente, en 1973. Mantuvieron una relación de amistad hasta que el cantante falleció en 1977. Ella ya estaba embarcada entonces en el mundo de la moda y del cine, donde interpretó papeles en series de televisión y en la gran pantalla, según el citado libro. Más allá de su faceta como diseñadora y actriz, Priscilla se dedicó a gestionar el patrimonio que el cantante dejó a su hija, contexto en el que optó por abrir al público la finca de Graceland en 1982. Tres años después, publicó las memorias Elvis and Me, título que ha inspirado el filme que lleva su nombre, 'Priscilla', y que ha visto su estreno en España en febrero de 2024.