Un 13 de septiembre de 1916 nació uno de los escritores más famosos e importantes de la literatura infantil y juvenil: Roald Dahl. El autor, que ahora cumpliría 104 años, hace 30 años que dejó de escribir.

Antes que escritor fue aviador, y con los años ideó una fábrica de chocolate, un melocotón gigante y hasta unas extrañas criaturas que no se podían mojar ni darles de comer después de medianoche.

Padre de Matilda, James y el Melocotón Gigante o Charlie y la Fábrica de Chocolate, Dahl ha vendido más de 250 millones de copias en todo el mundo. Y no solo escribió literatura para niños, sino también para adultos.

Sus personajes más conocidos fueron niños tremendamente inteligentes, en busca de revancha para combatir las injusticias. Pero no todas sus creaciones eran entrañables. "Sus malos eran malísimos", como expone la autora Begoña Oro. Y es que de la mente del galés nació la Señorita Trunchbull, un personaje con un lenguaje más que directo.

Su obra pasa de generación en generación. La escritora Beatriz Millán cataloga sus creaciones como aquellas que los niños "deben leer": "Hay ciertos autores que los niños y las niñas tienen que leer".

Y es que Dahl no solo escribió para niños. Sus personajes de cuento siempre tenían una moraleja: "No importa la edad que tengas, que tú puedes hacer grandes cosas", como ha detallado la autora Beatriz Millán. Ahora solo queda revivir en cada página la magia de sus clásicos.