La residencia de Estudiantes fue un catalizador para Buñuel, donde descubrió su vocación artística y su faceta más divertida y surrealista.
Durante los siete años que pasó en Madrid, compartió su vida con artistas como Lorca, Alberti o Dalí. Con ellos realizaba actividades como las tertulias del cine club y representaciones teatrales disparatadas, que fueron su primer paso hacia el surrealismo y la vanguardia que siempre le caracterizó.
Lo cuenta la escritora Celia Santos
El 'Plan Marta', el "cruel" programa de Franco y la Iglesia para repoblar Australia con mujeres españolas blancas
En los años 60, cientos de mujeres fueron enviadas a las antípodas con el objetivo de repoblar el país, como cuenta Celia Santos en la novela El país del atardecer dorado.