El Dj pone la música y los asistentes la diversión. Bueno, ellos, la playa, el buen ambiente y las ganas de pasárselo bien. ¿Entienden ya por qué la Comunidad Valenciana es el epicentro de los festivales?

"Y esa pasión festivalera que despierta en miles de personas", afirma Tomás Abril, responsable de comunicación del Arenal Sound.

En total, más de 20 citas repartidas de lado a lado del territorio valenciano. Entre ellas, cuatro grandes: El Low Festival de Benidorm para los más indies, el FIB ya desde hace 22 años en Benicassim para los veteranos, el Rototom, referente europeo de la música reggae y, por supuesto, el Arenal Sound, que este año ha reunido en Burriana a más de 250.000 personas.

Una verdadera fuente de ingresos para los valencianos. Sólo en Castellón, la ya conocida como tierra de festivales, estas fiestas generaron el año pasado 58 millones de euros. "Si sumamos lo que representan los grandes festivales de la Comunidad, se habla de más de 100 millones de euros", reconoce Francesc Colomer, secretario autonómico de Turismo.

Unos lo ven como una oportunidad, otros como una apuesta de futuro y los cientos de miles de asistentes como la mejor forma de disfrutar de la música.