Las previsiones del sector son que los compradores se animen ya desde a adquirir ejemplares para sus seres queridos, ya que las librerías que quieran podrán abrir en domingo.

En rueda de prensa hace unos días, la presidenta del Gremi de Llibreters, Maria Carme Ferrer, auguró que este año será muy buen Sant Jordi al ser laborable y a la espera de que la gente compre durante más días.

Pronosticó que en el área metropolitana muchos clientes compren el viernes y el sábado, "ya que suele darse que primero va a comprar para regalar y después vuelven en familia a Sant Jordi y compran nuevamente". Subrayó que las librerías que quieran estarán abiertas el domingo.

Según han informado a Europa Press fuentes del gremio, Barcelona ha concedido 890 licencias para la venta de libros durante la jornada, de las que 210 representan a agremiados del Gremi de Llibreters de Catalunya, mientras que el resto corresponden mayoritariamente a otro tipo de establecimientos, entidades y empresas.

Todas las librerías agremiadas celebrarán la Diada y tendrán parada en Catalunya --unos 300 establecimientos--, aparte de un centenar de puntos que corresponden a editores, distribuidores, librerías de viejo y alguna librería que va por libre.