Cuando su nombre apareció en los Papeles de Panamá, Imanol Arias defendió primero que él siempre había pagado todos sus impuestos: "Estoy al corriente de mis obligaciones de Hacienda y estoy muy tranquilo"

Más tarde, concedió que sus asesores fiscales le habían recomendado abrir una sociedad en la isla de Niue para ahorrar: "Quería tener una cuenta de ahorro y se me aconsejó fuera allí".

Finalmente, tras la operación de la Audiencia Nacional contra el despacho que le asesoraba fiscalmente, Arias tuvo que reconocer que no había cumplido todas sus obligaciones con el fisco.

Ahora, el actor ha decidido pagar todo lo que le reclama Hacienda, casi cinco millones de euros, para intentar minimizar una posible condena por delitos fiscales y blanqueo de capitales.

Cerca de 2,2 millones corresponden a lo defraudado, según la Agencia Tributaria, en los ejercicios 2010 a 2014.

Un presunto fraude investigado en el marco de la operación contra Nummaria, el despacho que asesoraba al actor.

La Audiencia Nacional acusa a Arias de cinco delitos fiscales y de blanqueo de capitales. Además, el actor ha pagado otros 2,7 millones que le reclama la Agencia Tributaria por irregularidades en el pago del IRPF de los años 2005 a 2010.