La actriz Blanca Portillo, en camiseta blanca básica, unos vaqueros y unas zapatillas, subió al escenario emocionada entre risas y lágrimas. La actriz aprovechó en su discurso de agradecimiento por el Premio Sur en la 26ª. edición del Festival de Málaga de Cine en Español de esta ciudad para lanzar unos mensajes poderosos sobre su profesión y la (no) importancia del físico en el mismo. El premio lo recibió el pasado domingo 12 de marzo, la noche de los Oscar, por eso pasó desapercibido su poderoso discurso. "He tenido que luchar contra mi falta de belleza", lanzó con un texto preparado en mano.

"Quiero dar las gracias por este premio. De verdad, yo pensaba que se habían equivocado", empezó al subir a recibir el premio. Y luego vino toda una declaración de intenciones: "Amo esta ciudad, amo este festival. Por eso, he decidido escribir este discurso". La actriz asegura que no suele ir con un texto preparado, pero la ocasión lo merecía.

Luego se dirigió al público para explicar por qué se presentó en vaqueros: "Os estaréis preguntando qué hace vestida así esta mamaracha en un noche de lujo y esplendor", dijo y después se alejó del atril para mostrar la ropa que llevaba. Es una decisión "muy pensada" porque esa noche Portillo no estaba "para defender un personaje o un trabajo concreto". "Estoy aquí porque habéis puesto en valor el trabajo de casi 40 años, dedicados casi de forma enfermiza a la interpretación", añadió y a continuación señaló quiere recibir el premio "como persona no como actriz". "Y esto es sencilla y llanamente lo que soy, Blanca. Una persona, un ser humano despojado de lujos y disfraces".

La también directora y productora de teatro es una mujer de 59 años que, según ella, "lamayor parte del tiempo tiene miedo y frío; que necesita desesperadamente cariño y apoyo". Se definió como una mujer "que prefiere los vaqueros a los trajes de lujo, las cañas con los amigos que el plan de las fiestas. Que prefiere amor a la admiración".

El físico y la belleza en su profesión

Antes de terminar el discurso, la ganadora del premio Goya 2022 a mejor actriz por 'Maixabel' hizo una comparación entre ella y el actor Brad Pitt: "Brad Pitt y yo", dijo provocando las risas del público, y continuó: "Tenemos algunas cosas en común. Tenemos la misma edad, tenemos exactamente la misma nariz, idéntica. De la mía se sacan cuatro suyas, pero son idénticas". Después bromeó diciendo que "es una lástima que naciera en Oklahoma y no en Burgos, por ejemplo, porque se ha perdido conocer el amor de su vida".

Esta comparación dio lugar a una crítica ácida sobre la importancia que se le da al físico y a la belleza en su profesión. Portillo asegura que ambos "han tenido que pelear para que se valoren sus actividades actorales" y no el físico. "Solo -agrega- que al revés. Él ha luchado contra su belleza para demostrar que es más que un rostro y un cuerpo hermosos y yo contra mi falta de belleza para demostrar que sin ella también se puede ser actriz", expresó.

Portillo explicó que este discurso, que ha sido muy aplaudido en las redes sociales, lo aprovecha para lanzar un "mensaje de fuerza y esperanza a todas y a todos a los que alguna vez les han dicho que les hace falta el físico para dedicarse a esta profesión". "Para dedicarse a ella, lo que hace falta es amor, esfuerzo, formación, capacidad de soñar, valentía, respeto, cultura, trabajo y devoción. Todo eso aumenta con los años y la práctica, todo lo demás se lo lleva el tiempo", terminó la actriz.