Hollywood está lleno de historias trágicas, pero desde luego ninguna como la que podríamos llamar la cuarentena más famosa de la meca del cine. Y no, no ha ocurrido de este 2020.

Hay que remontarse casi 80 años atrás para conocer la historia de un virus que arruinó la carrera de una de las estrellas más deslumbrantes de momento: Gene Tierney.

Directores y productores la llegaron a llamar 'la mujer más bella del cine', pero su belleza fue también su perdición. Su suerte cambió cuando una epidemia de rubeola obligó a confinar a la población.

Guillermo Balmori, editor del libro 'El Universo de Gene Tierney', cuenta que una fan de la actriz se saltó la cuarentena por rubeola. "Se salta la cuarentena para ir a ver a su estrella favorita, llega donde está ella y le da la mano", cuenta.

Días después, la actriz, embarazada en ese momento, descubre un sarpullido en la piel al que no da importancia. Pero cuando dio a luz, su bebé, Daria, nació sorda, con una discapacidad intelectual y parcialmente ciega.

"Esto destroza la vida a Gene Tierney, coge una depresión impresionante en medio de su auge", cuenta Balmori. La parte más cruel de la historia llegó años después, cuando esa misma fan que le estrechó la manó le confesó que se saltó la cuarentena de rubeola para saludarla y abrazarla.

Gene enloqueció. Intentó suicidarse y fue internada en un psiquiátrico. Luces y muchas sombras, las de la vida de una actriz que esta pandemia ha sacado a relucir su dramática historia.