El público debía llevar una maleta con lo justo: el pasaporte en vigor y un cepillo de dientes para salir directos desde el plató al Caribe. En 'No te olvides el cepillo de dientes' si los concursantes ganaban, a parte de que ellos cruzarían el Atlántico, los 250 asistentes del público se iban a Canarias.

En 30 años, la creatividad televisiva ha dado para mucho, y nosotros, hemos visto de todo: un concurso de versiones musicales ligadas con la actualidad o a Bertín Osborne cantando a pleno pulmón en Lluvia de Estrellas.

Fue allí donde un joven David Civera se subió por primera vez al escenario para cantar una canción de Enrique Iglesias. Sin duda, era otra época donde se medía el nivel de inteligencia entre seis grupos: profesores, estudiantes, bomberos, enfermeras, rubias y calvos.

Todos teníamos a nuestros favoritos, lo cual generaba ciertas tensiones familiares... pero eso era lo más divertido.